Vice pide no romper mando en lucha contra corrupción

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Foto: ABI

El vicepresidente  Álvaro García Linera señaló ayer que las denuncias de la generala Rosalía Chávez contra algunos jefes policiales “van a ser investigadas”, pero  aclaró que el Gobierno no acepta que se rompa la jerarquía de una institución armada como es la Policía Nacional.

“Que no se use la lucha contra la corrupción para romper el mando de una institución armada. Eso es anticonstitucional, antidemocrático y pre-golpista. Así de claro”, señaló.

El presidente Evo Morales, en el acto de aniversario de la Policía en Oruro, instó el miércoles pasado a los efectivos, sobre todo a los subalternos, a denunciar los casos de corrupción en la institución; incluso pidió una normativa que premie a estos policías.

En la misma línea, el ministro de Gobierno, Carlos Romero, dijo que la propuesta del Presidente sería incluida en la redacción de la Ley de Reforma Policial y que además se protegerá a los denunciantes.

García Linera aseguró que se investigarán las denuncias de la exsubcomandante de la Policía, generala Chávez, que recién hizo llegar con documentación a la Asamblea Legislativa, sin embargo, la criticó por la manera en que hizo públicas las acusaciones.

“Sus denuncias de corrupción debían seguir el mando institucional y el civil y no convertirse en una cuasi-parlamentaria que está en campaña política. Eso no aceptamos a ningún uniformado”, indicó.

“No vamos a aceptar nunca que una institución armada delibere, ninguna institución armada puede romper la disciplina del mando y la subordinación a su mando civil. (…) Que no se use la lucha contra la corrupción (para deliberar)”, dijo.

Para el Vicepresidente los uniformados deben saber que la lucha contra la corrupción tiene que estar en el marco de la estructura disciplinaria de su institución.

Corrupción

García Linera también confirmó que el Gobierno tiene conocimiento de la compra y venta de puestos dentro la institución policial, pero no las pruebas para demostrarlo. Advirtió que cuando se cuente con los documentos el o los responsables irán a la cárcel.

“Nosotros tenemos información de que hay compra y venta de puestos, lo dijo el mismo Presidente (Evo Morales), pero no podemos demostrarlo. Apenas demostramos, destituimos al responsable de semejante barbaridad y a la cárcel”, declaró.

En esa línea, el ministro de Gobierno, Carlos Romero, manifestó que las denuncias en la institución policial se dan todo el tiempo, por lo que son remitidas a las instancias que corresponden.  “Eso es permanente, nosotros tenemos en los últimos dos años unos 70 casos de policías que hemos remitido al Tribunal Disciplinario, otros a la justicia ordinaria como en una universidad o en el aparato de Estado, en las alcaldías. Hay muchos casos de policías”, señaló la autoridad de Gobierno.

A esto se suma un informe del Observatorio Democracia y Seguridad, el cual indica que durante el periodo democrático al menos el 80 por ciento de jefes policiales fue destituido o suspendido de sus cargos debido a denuncias de corrupción.

Así lo explicó a Erbol, la investigadora de esta fundación, Loreta Tellería. “Son varios los comandantes implicados porque las denuncias se han estudiado de manera constante”.

30 vehículos para la Policía

El presidente Evo Morales entregó ayer a la Policía 30 vehículos y equipos antimotín por un valor de 5,1 millones de bolivianos en el marco de los 189 años de la institución. Sin embargo, dijo que para esta gestión se cuenta con mil millones de bolivianos para invertir con el objetivo de mejorar el servicio a la población.

“El Estado tiene su compromiso que es equipar a la Policía. Se equipó bastante en nuestra gestión, pero destinamos una pequeña parte del IDH (Impuesto Directo a los Hidrocarburos) para seguir equipando a la institución”, dijo.

En el acto que se desarrolló en la Academia de Policías, en la zona sur de La Paz, Morales pidió priorizar las necesidades y elaborar proyectos “tipo” para construir estaciones policiales integrales.

De acuerdo con el ministro de Gobierno, Carlos Romero, el Ejecutivo aumentó el equipamiento de la Policía 10 veces más que en la etapa neoliberal, ya que hace 10 años en promedio había un motorizado para 25 uniformados, mientras que ahora esa relación bajó a uno por cada 17.

En la línea del Jefe de Estado, Romero expresó su deseo de contar con una “Policía referente” y convocó a desarrollar un trabajo “ejemplar”.